Parásitos de las mariposas
Los depredadores de las mariposas son de naturaleza y de tamaño muy variable y van desde pequeños insectos a grandes mamíferos. Los pájaros son, sin duda, los depredadores más temibles para las mariposas, en particular cuando deben alimentar a sus crías. Los murciélagos también hacen grandes estragos en las mariposas nocturnas, que capturan al vuelo después de repararlas a través de sus ultrasonidos.
PÁJAROS, MURCIÉLAGOS Y ZORROS
Aunque esto pueda parecer asombroso, los zorros también forman parte de los depredadores de las mariposas. En efecto, cuando su alimento acostumbrado falta, éstos pueden consumir grandes cantidades de orugas, que detectan gracias a su olfato y a su vista extremadamente desarrollados. Los lagartos también son muy rápidos y muy discretos. Éstos atacan sus presas por sorpresa, cuando pasan cerca de ellos.
LAS ARAÑAS
Las arañas son muy conocidas por ser devoradores de mariposas. Aunque no son las más destructoras. Las arañas tienen dos técnicas de caza. La primera es la tela, que tejen en puntos estratégicos de los setos y de otros puntos de pasos de los insectos, que no perciben la trampa. La otra técnica es esconderse donde las mariposas van a alimentarse (en el corazón de las flores). Las arañas que adoptan esta técnica son generalmente blancas o amarillas y pasan inadvertidas.
MOSCAS Y AVISPAS
Las mariposas pueden ser víctimas de numerosos parásitos. Son generalmente las moscas o las avispas quienes ponen sus huevos dentro del cuerpo de las jóvenes orugas. Cuando estos huevos hacen eclosión, las larvas que lo sacan se alimentan del cuerpo de la oruga. Aunque esto no conlleva directamente la muerte de la oruga.
Así, el parasito continúa alimentándose y sirve de incubadora para las larvas. Cuando éstas alcanzan su madurez, hacen un agujero para salir del cuerpo de la oruga. Y aquí sí que mueren. Las larvas se fijan entonces sobre la piel de la oruga, que les sirve de soporte para la continuación del desarrollo.
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