Los pájaros también pueden sorprendernos con sus ocurrencias y habilidades para adaptarse a cualquier espacio. En estas fotos vemos cómo construyeron sus nidos en sitios y lugares impensados, aunque siempre buscando la seguridad requerida para sus huevos y pichones.
Hasta hace poco se creía que la habilidad para construir nidos era inherente a los pájaros pero recientes estudios, sin negar lo anterior, demuestran que a lo largo de su vida pueden aprender cómo perfeccionar y adaptar sus construcciones al espacio del que disponen, que puede ser tan insólito como un limpiaparabrisas de un auto estacionado por varios días.
El hombre también ayuda a que el trabajo de los pájaros se haga más fácil. Desde el siglo XV ha diseñado casas ocurrentes y vistosas para que las aves se alojen y críen su descendencia, lo cual constituye, junto a las propias iniciativas de los pájaros, en una alternativa ante la disminución de lugares naturales para anidar producto de la deforestación.
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