Tamarino león dorado
El tamarino león dorado, o lentopithecus rosalia, es un mamífero que pertenece al orden de los primates. Es originario de Brasil, concretamente de su costa atlántica. Vive únicamente en Río de Janeiro. Normalmente busca zonas en selvas costeras o donde haya bosques de vegetación muy densa. En ocasiones se le puede ver deambulando por las zonas donde hay plantaciones de cacao. Siempre busca la humedad y es raro verlo en lugares cuya altitud supere los 300 metros.
Donde mejor se encuentra es en las ramas de árboles de gran altura. Busca agujeros en los troncos y las ramas para dormir y protegerse de la intemperie y de otros animales.
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¿Cómo es el tamarino león dorado?
Físicamente es un animal bastante original, dado su pelaje de color rojizo y relativamente dorado. En cambio, el rostro de este animal no tiene pelo y tiene un color más oscuro. Las patas delanteras también pueden tener esta tonalidad más oscura que el resto del pelaje.
Este primate mide unos 25 centímetros, aunque puede sobrepasar los 30 centímetros en algunas ocasiones. Pesa algo más de medio kilo, unos 600 gramos. Exteriormente los machos y las hembras son muy similares. Todos ellos disponen de garras con uñas que les ayudan a trepar fácilmente y a agarrarse a los árboles.
¿De qué se alimenta este primate?
El tamarino león dorado es un animal omnívoro. Entre los vegetales que consume, le gustan especialmente las frutas, el néctar y las flores. Cuando come animales se alimenta de animales de pequeño tamaño, escogidos entre aves, caracoles, reptiles, huevos y arañas.
Normalmente opta por los vegetales por la mañana. Por la tarde sale a cazar insectos utilizando sus largas pezuñas para alcanzar lo que encuentra en grietas y huecos de los árboles.
Este primate se relaciona con su pareja y sus crías. Todos los miembros forman un grupo y este suele constar de unos 3-7 miembros. La pareja del grupo tiene que estar formada por una hembra en edad reproductora y un macho también edad reproductora, ambos procedentes de distintos grupos. No obstante, puede haber movilidad entre los miembros de distintos grupos, predominando la de los machos.
No es infrecuente encontrar algunos grupos formados por miembros que han sido expulsados de sus grupos de origen o que los han perdido. También puede ocurrir que haya individuos que vivan de forma aislada. No obstante, no forman una estructura familiar tan concreta ni necesitan miembros de ambos sexos en edad reproductora.
Reproducción y ciclo de vida
Los estudios parecen indicar que el tamarino león dorado es un primate monógamo. La hembra de la pareja puede dar a luz 1 o 2 veces al año. El tiempo de gestación es de unos 4 meses. Lo más habitual es que cada pareja tenga 2 crías, aunque a veces tienen tan solo una o pueden llegar a tener 3.
La edad de madurez sexual de los machos y de las hembras no es la misma. Normalmente las hembras alcanzan la edad reproductora a los 17 meses. Los machos, por su parte, la alcanzan algo más tarde, aproximadamente a los 28 meses.
La longevidad de este primate varía algo en función de si vive en cautividad o en su propio hábitat. De media suele vivir entre 10 y 15 años.
Un animal en peligro de extinción
El tamarino león dorado es una especie que se encuentra gravemente amenazada como consecuencia de varios factores. Por un lado, la destrucción de su hábitat limita las zonas donde vivir adecuadamente en libertad y poder reproducirse. La principal causa es la deforestación para utilizar los campos para otros usos, como la agricultura y la ganadería, o para construir viviendas y urbanizar la superficie.
Otro factor que aumenta el peligro de extinción de este animal es su adquisición como mascota y también para incluirlo en los zoológicos. Por suerte, este problema se ha visto parcialmente reducido, aunque el problema del hábitat sigue presente.
Tras un periodo especialmente crítico en el que se llegó a reducir la población del tamarino león dorado a 200 ejemplares, actualmente se estima que hay unos 100 individuos en estado salvaje. Para lograrlo ha sido necesario, y seguirá siéndolo, la creación y mantenimiento de programas de cría en cautividad para reintroducirlos posteriormente en su hábitat natural.
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