El doberman es una raza de perro con una gran apariencia, que por lo general todo el mundo consigue identificar cuando lo ve. Aunque pueda tener una fama de perro peligroso, se va a llevar muy bien con su dueño y toda su familia, incluyendo a los más pequeños de la casa. Para conocer más a este formidable perro, te hemos elaborado la información que encontrarás a continuación.
Tabla de contenidos
Tamaño de los machos: 68-72 cm
Tamaño de las hembras: 63-68 cm
Altura de los machos: 69-73 cm
Altura de las hembras: 64-69 cm
Peso de los machos: 40-45 kg
Peso de las hembras: 32-35 kg
La apariencia del doberman es de un perro muy fuerte con elegancia en su forma de caminar, enseñando musculo y con una estatura mediana. Se trata de una raza temperamental, seria y con dotes de liderazgo entre otros perros.
Cuando hablamos de la forma del cuerpo de estos animales, nos encontramos una musculatura bien definida sobre la piel, con una buena relación entre la altura a la cruz y el resto del cuerpo.
Si nos fijamos en el hocico del doberman, tiene que contar con una longitud bien desarrollada, aunque siempre guardando una buena proporción respecto al cráneo, pero suele ser prominente. La nariz de estos animales es grande, pero sin tener un aspecto redondeado, con unos orificios nasales grandes pero sin que estos sobresalgan. Cuando nos encontramos con ejemplares de color negro, la nariz suele ser del mismo color, sin embargo, en el caso de que el pelaje del doberman sea de una tonalidad café, la nariz será siempre más clara que este color.
El color de los ojos de los doberman siempre va a ser oscuro, casi negro, a excepción de los ejemplares más claros, que su tonalidad también va a clarear pero no demasiado, teniendo unos ojos medianos. Cuando hablamos de las orejas de los doberman, antiguamente se recortaban para que estas quedarán levantadas, pero hoy en día son muchos los países que prohíben esta actividad, quedando unas orejas mucho más amplias pero por lo general, siguen quedando levantadas, sobre todo cuando está detectando algún sonido extraño.
Respecto al cuerpo, su pelaje más característico es el negro azabache, aunque en las patas, hocico y pecho van a estar cubiertas de un pelo marrón. El pelo de este animal es suave, muy corto, por lo que hace sentirse más la musculatura debajo de la piel. En el caso de los ejemplares que cuentan con un pelaje de color café, el susodicho pelo de las patas y hocico será más claro aún. La cola es muy fina y larga, quedando erguida en la mayoría de los ejemplares.
Tenemos que olvidarnos de la imagen que la televisión, o las películas dan de esta raza de perro, puesto que tienen un enfoque totalmente equivocado. Aunque es cierto que se trata de un animal bravo, con temperamento y mucha personalidad, se trata de unos de los perros más dóciles y amistosos, al igual que también será pacífico. Cuando está criado en una familia, es muy demandante de cariño y de mimos, gustándole estar con la familia, como también con los niños, a los que adora. Se trata de un perro muy alegre, que le gusta correr y jugar. Si tiene una buena educación y un adiestramiento efectivo, es capaz de ser un gran animal para rescates y otros servicios a la comunidad, puesto que es muy seguro, contando con una valentía y una resistencia increíbles.
En temas de salud, el Doberman es una de esas razas que, por lo habitual, no va a enfermar, aunque si es cierto que es necesario cuidar ciertos aspectos de este animal para que todo vaya en perfectas condiciones y pueda contar con una salud de hierro. De vez en cuando pueden presentar ciertas enfermedades de carácter leve, pero sin embargo, con el mínimo conocimiento, se podrán tratar sin la necesidad de dirigirse a un veterinario para tener un tratamiento. De igual modo, para cualquier posible problema que aparezca, le recomendamos que acuda a un especialista para evitar males mayores.
Como también ocurrirá con otras razas de perros, el Doberman puede llegar a presentar enfermedades de la piel debido sobre todo a ciertos hongos que se le adquieren a la dermis, como también bacterias y parásitos, aunque por otro lado, existen alergias de la piel que son genéticas y que están íntimamente relacionadas con las hormonas de estos animales. Uno de los síndromes más conocidos en los Doberman es el denominado como “Doberman azul” en el que estos animales han perdido una tonalidad del negro de su pelaje y tienen un aspecto azulado. Esto se debe a diferentes motivos, en los que se incluyen la alopecia o falta de cantidad de pelos, lo cual hace que su aspecto no sea de un negro intenso, pero también de una dilución del propio color. Esto es una enfermedad de nacimiento, y que desgraciadamente no se puede curar, pero por el contrario, no van a afectar a la salud o vitalidad de estos animales, aunque se recomienda que se controle mucho más la piel por medio de champús para el pelaje especializados en estos trastornos para evitar que esta zona de su cuerpo sea más sensible.
Entre otras de las enfermedades comunes que suelen sufrir es la denominada como Síndrome de von Willebrand en la que estos animales les cuestan que la sangre coagule, por lo que pueden llegar a sufrir muchos cardenales o hemorragias. Se trata de una enfermedad que se trasmite desde los padres a las crías. Para detectar su un ejemplar cuenta con este problema, se pueden realizar una serie de pruebas en las que se determina si lo sufre. En el caso de que sea afirmativo, se debería de pensar si se toma como animal reproductivo o comentar con el veterinario los cuidados que deben de tener.
Los doberman son perros muy valientes y con una gran fortaleza física y también mental. Son grandes observadores, que pueden detectar cualquier suceso en la lejanía. Les encanta correr y pasear, por lo que para un cuidado óptimo se debe de pensar en sacar a este animal a la calle varias horas o contar con un gran jardín donde tenga muchos juguetes con los que jugar.
En el caso de los trabajos, si se adiestra como es debido, podrá hacer todo tipo de tareas, siempre y cuando se le haya enseñado desde pequeños, aunque de igual modo de mayor puede aprenderlas, pero le costará algo más recibir órdenes de este tipo.
Son muchos los dueños y adiestradores que los usan para competición ya que son muy leales en estas destrezas pero también porque disfrutan de lo lindo siguiendo los circuitos de obediencia y agilidad. Por otro lado, si se tiene un buen ejemplar, en las exposiciones de belleza es uno de los más admirados, puesto que es capaz de mostrar una presencia y elegancia que pocos perros tienen.
La fama que tienen estos perros de salvajes y agresivos les viene de la Segunda Guerra Mundial, ya que los americanos usaron estos perros bien adiestrados para encontrar enemigos debajo de los escombros o incluso en cuevas o sótanos ocultos, haciendo que en estos casos, el perro se encargase de ellos. Desgraciadamente esta imagen fue quedando en la retina de muchas personas que fueron transmitiendo esta desafortunada imagen y haciendo que la reputación del doberman fuese negativa, tanto que a día de hoy, es una de las razas de perro característica en ciertas sagas de películas de miedo.
En muchos casos, se pregunta si una raza de perro es la ideal para una persona, pero deberíamos de realizar la pregunta al contrario, si la persona es ideal para esa raza de perro. Esto está formulado así, porque muchas personas pueden elegir al doberman como mascota, sin embargo, no cuentan con las exigencias que este animal necesita, como es el caso de tener un ritmo de vida activo. Si eres una persona que pasa la mayor parte del tiempo sentado o no te gusta salir a la calle a pasear, tener un doberman como amigo no es aconsejable, porque estos animales necesitan mucha actividad, pero no solo de correr o salir a pasear, sino también de juegos y actividades, puesto que si no queman esa energía se vuelven ariscos y muy desobedientes.
Por otro lado, también se debe tener una personalidad fuerte, que pueda dominar al doberman y no al contrario, recuerda siempre la frase que dice que un perro siempre se debe parecer a su dueño, pues en este caso es así, debiendo de tener el control en todo momento, pero ser una persona pacífica y muy cariñosa. Es necesario, como hemos comentado anteriormente que se le pongan retos y muchos juegos y movimientos, puesto que la mente de este animal es muy activa, al igual que su cuerpo y si no está activado, contará con un comportamiento destructivo para hacerse notar y que el dueño esté pendiente a lo que hace.
Cuando se adiestra y se educa desde pequeño, se trata de una de las razas que más se sabrán comportar y es algo que se admira en los doberman.
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